A decir verdad, antes de comenzar a reunirme con Graciela, tenía dudas sobre la utilidad de hacer una orientación vocacional. Después de todo, ya tenía alguna idea de lo que quería estudiar. Nunca me imaginé la enorme ayuda que Elegir me brindaría para consolidar mis planes para el futuro.
A partir de nuestras reuniones, pude consolidar mucho mi determinación a estudiar ingeniería informática. Al evaluar otras carreras similares, y entender mejor qué es lo que implica cada una, pude entrar en los detalles para tomar la decisión justa. Además, Graciela me ayudó a entenderme a mí mismo mejor, y por qué tomé las decisiones que tomé en este proceso, así permitiéndome librarme de influencias externas y pensar independientemente.
Finalmente, Graciela jugó un rol esencial en ayudarme a ganar confianza en que mi proyecto de estudiar en Estados Unidos, que ya había tenido por un tiempo, era efectivamente lo correcto para mí. Ahora que ya está definido que voy a estudiar afuera, y estando admitido en Stanford y en Princeton, tengo mucha más confianza en que todo va a estar bien gracias a Elegir.