Hay una gran diferencia entre llegar a tu casa con una lista de carreras que son los resultados de unos tests y llegar a tu casa con una elección concreta. Hoy terminé orientación vocacional con una carrera y una facultad definida y elegida por nada más y nada menos que YO.

Terminé el colegio el año pasado con una lista de carreras en las que “me iría bien” por mis aptitudes, y empecé este año haciendo dos carreras porque no me podía decidir por cuál hacer. Estuve más de un mes yendo de la Facultad de Ingeniería a la Facultad del Cine con un lío tremendo en mi cabeza porque, claramente, no había hecho una decisión reflexiva sino que había agarrado las top 2 carreras que me «habían dado» en la orientación vocacional anterior.

En la orientación que hice con Elegir, pude ver y analizar TODAS las carreras disponibles (para no quedarme con la duda de si me hubiera gustado más hacer otra carrera), pude ver y analizar las que más me gustaban, pude ver y analizar las que era más capaz, y lo más importante de todo es que pude ELEGIR UNA Y SOLO UNA carrera que COMBINE todo lo que yo quiero (desde mis gustos, hasta mis exigencias y las oportunidades laborales que ofrece nuestro país). Me voy decidida y TRANQUILA con mi decisión. ¡Muchas gracias!